miércoles, 19 de febrero de 2014

Cross de San Blas. Fresno el Viejo (Valladolid)





Hoy he quedado satisfecho en el Cross de San Blas de Fresno el Viejo. ¡Como para no estarlo! Salí con Adrí Carabias y con Juan Bueno, el campeón macoterano. Hicimos juntos todo el trayecto y llegamos a la vez a la hora de la verdad. Le cedí el paso al bueno de Juan, pero éste, muy cortés me dijo que de eso nada, que pasara yo primero. Y eso hice. O sea que técnicamente se puede decir que he llegado antes que Juan Bueno. Si no os lo creéis podéis preguntarle a Adri que estaba presente, o al mismo Juan. Pero no queda la cosa ahí: además el agua estaba caliente.  Y es que fui el tercero en llegar a la ducha, Juan el cuarto y Adri el quinto. Eso decía, ¿o es que habíais pensado otra cosa? En la carrera ya fue otro cantar. Aquí no hubo quién pudiese con el macoterano, que dominó desde el principio y se llevó el jamón del ganador.

Yo entré en la posición 126 de entre un total de 158 corredores, o el 11º de 14 en mi categoría, con un tiempo de 40’40” para una distancia de 8,3 Km, o sea que ligeramente por debajo de 5 min/Km, que para mí historial como deportista y para haber estado hasta un par de horas antes atracándome a vino, jeta y oreja a la plancha, no está nada mal. Y además me tomé un chupito de orujo tras el potaje que me metí tras acabar los vinos. ¿Qué más voy a pedir si todavía adelanté a treinta y tantos?
En esta edición estuvimos Adri, Álvaro Bernal, Manuel, Edu y el que esto escribe. Además, para darnos ánimos, se vinieron Pardi y Francis. Menudo frío hacía. Me alegré del chupito de orujo, aunque no me quité los guantes y corrí de largo. El trazado era diferente al del año pasado, pero me gustó. Una buena parte discurría por caminos agrícolas, que es nuestro hábitat natural en esto del correr, con alguna cuestecilla ligera y un recorrido como de 1 Km por las calles de Fresno al final de cada vuelta. 
Los compañeros fantásticos: Manuel, con 30’43” quedó el 11 de la general y 3º de su categoría; Edu, a punto de pillar un lomo, quedó 2º en su categoría con 31’38”; Adri, que llevaba el dorsal de Ángel Clavo, 33’09” y Bernal 36’08”

El ambiente en el pueblo regular, pero la organización muy buena, aunque anunciaban una degustación de productos de la tierra que no llegó a producirse. Menos mal que teníamos el bar justo en la meta y pudimos recuperar líquidos para varias carreras, por lo que pueda venir.  Al entrar en la meta nos quitaron el dorsal para hacer un sorteo. El año pasado me traje un estuche de vino, éste le tocó a Adri, aunque me sospecho que algo le correspondió también a mi número, porque cuándo al finalizar el sorteo fui a recoger el dorsal, no pude encontrarlo en el montón.  Ya he dicho que estábamos hidratándonos en el bar y soplar y sorber no puede ser. Pero no pasa nada. Al año que viene volvemos y seguro que algo cae. Es lo que tienen estas carreras poco concurridas: que el pódium es más asequible para los buenos del grupo, que tienes más posibilidades de pillar algo en los sorteos, que puedes llegar al agua caliente de las duchas y si no hay suerte, el bar te pilla justo al lado. Viva San Blas.  

1 comentario: