lunes, 30 de junio de 2014

Un "meme" muy memo. O sea, que no llega a memorable.



Cada vez que Doña Díriga, Dáriga, Dóriga me pide algún escrito, procuro darle cumplida satisfacción. Es una lianta, pero la tengo mucho cariño y no se negarle nada. Hoy me toca participar en un proyecto denominado Blog Hop Project, que consiste, al parecer en contestar a cuatro preguntas: ¿Sobre qué estoy escribiendo actualmente? ¿En qué difiere mi escritura de la de otros que desarrollan el mismo género? ¿Por qué escribo lo que escribo? ¿Cómo es mi proceso de escritura?, y en pasarle la pelota a otros tres blogueros para que continúen la historia, en uno de esos procesos piramidales que tanto proliferan últimamente por las redes.



Cuándo uno piensa en un escritor, se imagina a prolíficos autores como Galdós, trabajando durante horas intensamente, como Tolstoi, o como Alonso de Madrigal, escribiendo a la luz de un pábilo, ganándose el sobrenombre de Tostado, porque su piel se ennegrecía con el humo de  las velas, o a gente de oficio, que madruga y se encierra en un cuarto hasta escribir un número de páginas, como Marcial Lafuente, o Javier Marías. Formas de escribir hay tantas como escritores. Y manías, sobre todo muchas manías: Unos fuman, otros pasean por la habitación, otros necesitan silencio absoluto, otros un papel verjurado crema, una estilográfica Mont-Blanc o una vieja Olivetti. La cosa es convocar a las musas y a poder ser, que éstas te encuentren trabajando, como decía Picasso. Pero claro, hablamos de escritores, de autores serios, de gente con rigor. No es mi caso. Yo sólo soy escritor para mi amigo @o_fragha  y cuando @londones me requiere, el resto del tiempo soy bibliotecario, o correcaminos, o lector, aunque una de las cosas que más me gusta es ser comensal en una mesa repleta de amigos. Ahí lanzo el guante.  Si luego hay que escribir sobre ello, se escribe, y se vuelve a disfrutar, que la escritura también vale para eso, para volver a vivir momentos que te gustaron y para compartirlos con los demás.  Por eso, cuando empecé a correr se me ocurrió escribir y recoger las crónicas de las carreras en las que participaba en un blog, en el que también pueden encontrarse algunas otras cosas, como una apología del vino, o recordatorios de diversos eventos y quedadas amistosas. Poca chicha. No soy muy dado a las reflexiones profundas, ni  soy sistemático, ni ordenado. Al contrario, me considero un tipo anárquico, desordenado y sin método, poco dado a imponerme obligaciones, que escribe simplemente cuando le apetece y no planifica previamente, o sea que ahora mismo no estoy escribiendo nada.  Mejor dicho, estoy escribiendo estas líneas y en la cabeza sólo tengo sitio para mis inminentes vacaciones, por lo que voy a tratar de agilizar el proceso.  Aunque eso sí, me gustaría ponerme un día a escribir una novela, posiblemente social, o de ambiente rural, o de la vida en el campo, o de tipo familiar, es decir, de cosas que me resulten cercanas, y es que cuándo me pongo muy sesudo o quiero profundizar y mostrarme reflexivo y dejar un pensamiento o una frase para la posteridad, no me sale absolutamente nada, por lo que deduzco que mi destino no es el de abrir nuevos caminos literarios. La verdad es que me importa un comino.  Me interesa mucho más, que las cosas triviales que escribo gusten al puñado de lectores incondicionales y casi cautivos que tengo. Pero para eso he de abandonar cualquier atisbo de seriedad o de trascendencia y ponerme a contar las cosas como lo haría hablando. Digamos que escribo como hablo, pero sin meter tanto la pata, porque la escritura al fin y al cabo te permite corregir un error, o ser menos impulsivo y la palabra mal dicha no hay quien la pare. Menos mal que se las lleva el viento.  Me parece que de una u otra manera he dado respuesta a las preguntas que se plantean en este meme, que dicho sea de paso, no tengo ni puñetera idea de lo que significa, pero lo he hecho a mi manera, saltándome los esquemas, pasándome las preguntas por el forro y escribiendo las palabras que se me vienen a la cabeza en el momento. Sin filtros. Lo que no sé desvelaros es en que difiere mi escritura de la de otros. Os va a tocar leerme y averiguarlo vosotros mismos si queréis saberlo. 


Y, por último, en el uso de las facultades que me han sido conferidas cuando acepté escribir este “meme”, yo nomino, o mejor dicho, conmino a seguir con la “memería”, a @Lillomonte, @mcadenato y @gorkafm, todos ellos blogueros de referencia. Ahí os queda eso.